OCS o El infierno de la logística (Parte II, la venganza)
Continuamos con esta serie de artículos sobre OCS que pretende dar unas pinceladas sobre el la serie para despertar el interés (o una repulsa meditada) de quienes aún no lo conozcáis.
III
En OCS no basta con trazar una línea de abastecimiento hasta la retaguardia para garantizar que nuestras unidades operarán a pleno rendimiento. Ni mucho menos.
Si queremos mover una unidad mecanizada o motorizada, si queremos combatir, si nos defendemos de un ataque, si queremos tener disponibles los aviones que participaron en misiones el turno anterior, si queremos bombardear al enemigo con nuestra artillería o si queremos evitar la rendición de unidades sin enlace logístico con retaguardia… tendremos que invertir puntos de suministro.
Sobre el tablero tendremos fichas que representan los suministros.
Cada supply point (SP) lo podremos dividir en cuatro tokens1 (t) que usaremos para «pagar» cualquiera de las acciones arriba listadas. Por poner un ejemplo: cada regimiento (o unidad de menor tamaño) que participe como atacante en un combate supone la inversión de un token. ¿Por qué ha ideado un sistema con fracciones?… ni idea. Igual no es lo más intuitivo del mundo, la verdad. Pero uno se hace a todo. Hasta al programa Padre de Hacienda, que ya es.
El caso es que sólo podremos usar puntos de suministro si las unidades que lo necesitan llegan a él, generalmente trazando un recorrido ininterrumpido, libre de ZoC enemiga, que no supusiera la inversión de más de cinco puntos de movimiento. ¿Complicado? En vulgo: que las fichas de suministro tienen que estar cerca de las unidades que los vayan a a consumir. Los cuarteles generales (también fichas sobre el mapa) tienen la capacidad de «lanzar» suministro a mayor distancia así que se tiende a organizar las operaciones alrededor de estas representaciones de mando.
Adicionalmente, podremos mover nuestras fichas de suministro por ferrocarril, por barco, por avión; podremos transportarlas con vehículos motorizados o acercarlas al frente en burra, a caballo o a lomos de un yak. Todo esfuerzo es poco para mantener abastecidos a nuestros muchachos.
El número de SP que recibamos cada turno y por dónde nos llegan viene determinado por el escenario, muchas veces previa tirada en una tabla que hará polvo vuestra previsiones menos optimistas. También se los podremos quitar a nuestro adversario. ¿A que ya estáis salivando?: robar el suministro a nuestro contrincante.
– ¿Puede haber algo mejor?
– ¡No con la ropa puesta!
IV
Por supuesto no es todo tan sencillo como acabo de describir.
Por lo pronto, si una unidad no puede acceder a fichas de suministro, puede tirar de suministros «internos» hasta dos veces antes de quedar exhausta peeeeero volver a ser una unidad operativa saldrá caro. Caro en SP, se entiende.
Además, si una unidad no puede trazar una línea ininterrumpida – hexágono a hexágono y libre de ZoC enemiga – hasta una fuente válida de suministro durante su Fase de Abastecimiento2 se verá obligada a consumir SP sobre el tablero (si puede, claro) sólo para subsistir. Dicho de otro modo: hay que pensar muy mucho dónde ponemos nuestras unidades porque pueden resultar eliminadas sin que el enemigo dispare un solo tiro, de puritita hambre, si no pueden establecer contacto con la retaguardia durante demasiado tiempo. La capacidad para vivir «con lo puesto» dependerá de la Calidad de las unidades. Todo son facilidades, ¿verdad?
Resumo: no podréis avanzar todo lo que queréis; no podréis atacar todo lo que queráis y vuestras tropas van a pasar hambre. ¡Así es la guerra!
Vitaminaos y nos vemos en la próxima.
– – –
- Literalmente «ficha» o «testimonio, muestra» en castellano.
- Supply Phase, justo antes del combate terrestre.