Habréis notado que en los laterales de esta web se anuncia Quest Stories, el nuevo juego que publicará Ediciones Primigenio, ilustrado por Chema Vicente, maquetado por Paco Dana y diseñado por el que escribe.

Gran parte de la gracia de Quest Stories se encuentra en una figura retórica que me encanta: el oxímoron. Un oxímoron se define como la presencia de dos términos opuestos para crear un nuevo sentido. Por ejemplo, los clásicos: un instante eterno, puede que el instante haya sido de tal importancia que haya hecho detenerse el tiempo; o un silencio atronador, en una situación tan tensa que ensordece más que el ruido.

En Quest Stories hay 80 personajes (más alguno promocional) y muchos de ellos pretenden ser un oxímoron andante. Quizá los que podría entender cualquiera sean algunos como el ermitaño sociable, el anciano ágil, el ilusionista desilusionado o la música desafinada.

quest-stories-ilusionista-desilusionado

Ya si nos vamos a un vocabulario más específico de fantasía o de frikismo en general, nos encontramos con una medusa tímida, un berserker reflexivo o un druida sesgado, entre otros.

quest-stories-medusa-timida

Por cierto, lo más gracioso es que mi nombre, Pablo Grande, es un oxímoron, pues Pablo significa pequeño.

9 Comentarios

  1. ¡Cómo me gustan los oxímoron! Inteligencia artificial y realidad virtual son mis favoritos. No sabía que Pablo significara pequeño, ¿lo sabrá Pau Gasol? (Pau es Pablo en catalán).

Dejar respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.